Basta recorrer los pasillos del Hospital Regional Antofagasta para advertir que es un lugar peligroso para la salud… Puede ser un gran contrasentido, pero se ven palomas revoloteando sobre las camas de enfermos, notable falta de higiene, baratas que se pasean por encima de las fichas clínicas, sólo por citar algunos ejemplos.
Inaugurado el año 1966, durante la administración del Presidente Eduardo Frei Montalvo, el edificio cada día se deteriora más. A sus problemas de infraestructura se suma la suspensión de las intervenciones quirúrgicas programadas por parte de los médicos que exigen la contratación de cirujanos especialistas que permanezcan en el hospital todo el día en la modalidad de residentes.
Por ahora, lo único que queda para los pacientes es la esperanza de un nuevo hospital, que debería estar terminado durante 2010 y que se proyecta con una inversión cercana a los $55.000 millones.
Mientras tanto, los antofagastinos no sólo temen a las enfermedades sino que por el sacrificio que significaría permanecer en el hospital, en donde no es seguro contra con agua caliente, es necesario llevar sábanas propias e incluso se corre el riesgo de quedar junto a un muro húmedo donde la pintura se descascara sobre la cabecera.
El panorama es deprimente, una dura realidad del “peor hospital” del país, a juicio del Colegio Médico.

Fuente: Diario El Mercurio-Nacional; Domingo 29/07/07; Pablo Carrasco.